Capítulo 30

Capítulo 30
El medallón...



Al fin la novena planta, se acabó toda esa psicosis del inframundo. La sala estaba bacía así que se me ocurrió una brillante, fantástica y maravillosa idea
Hikari: No se vosotros pero yo creo que es el momento idóneo para echarse una buena siestecita…
No esperé a que me respondieran, me tumbé en el suelo.
Héctor: ¡Dios mío! Hikari ha tenido una buena idea ¡Milagro!
La lancé una mirada asesina a Héctor….Me pregutno cuantas veces habrán maldecido sobre el por sus comentarios. Nos acurrucamos uno al lado del otro. Yo me quedé entre PP y PG. Cerré los ojos casi al instante. Ahora toca lo de siempre…
Axel termina de subir las escaleras y lega a la habitación en la que se encontraba la mujer.
Mira a su alrededor unos instantes y luego clava su vista en la estantería. Se acerca y comienza a vaciar los estantes hasta dar con el libro que habría el pasadizo y entró por el portal.
Había unas pequeñas escaleras sumidas en la oscuridad que conducían a una zona algo iluminada.
Cuando Axel llegó al fondo del pasillo en su cara se dibujó una expresión de estupefacción, creo que la misma que yo puse al ver semejante panorama. La mujer estaba en el suelo, tumbada en medio de un gran charco de sangre. Aún tenia al bebe entre sus brazos.
A su lado había varios hombres moribundos que estaban siendo rematados pos decenas de sincorazón. Cuando acabaron de matar al último se abalanzaron sobre la mujer. Axel frunce el ceño y en la sala comienza a hacer mucho calor.
Todos los sincorazón se carbonizan antes de hacerle algún rasguño a la mujer.
Entonces se acercó a ella y la zarandeó un poco suavemente.
“Majestad, por favor, responded, abrid los ojos”
La mujer abrió los ojos débilmente.
Miró a Axel de arriba abajo, parecía decepcionada.
“Sus sospechas eran ciertas…”
“Lo siento majestad, yo no…”
La mujer sonrió. Su sonrisa emanaba tranquilidad.
“Olvídalo pequeño, se lo que te pasó, no tienes la culpa”
La mujer intentó levantarse pero las heridas a penas la dejaban respirar. Le acarició el pelo al niño con dulzura.
“Axel durante todo este tiempo me has servido bien, tan solo quiero pedirte un último favor”
La mujer extendió a duras penas sus brazos y le ofreció a Axel la criatura.
Axel la miró y miró al pequeño ser que la mujer le tendía. Quiso decir algo pero se su boca no salió sonido alguno.
“Por favor…Cuídala. Llévala tras una de esas puertas, ocúltala todo esto, y cuando haga buen uso de razón prométeme que le darás esto…”entonces la mujer le entrega a Axel un bonito medallón con forma de corazón.
Axel miró con el ceño ligeramente fruncido al medallón, luego miró a la mujer.
“Majestad… ¿Sabéis lo que me pedís?”
“Axel… ¿Querías a Miriam?”
El niño agacha la cabeza, sus ojos se ponen cristalinos y luego susurra con un hilito de voz
“Si… con toda mi alma”
“Te aseguro que ella será lo mas cercano que puedas encontrar”
Axel observó a la criatura que reposaba en sus brazos
“Axel, ella es la única forma con la que podrás volver a estar completo…”
“¿Quieres decir que mientras la cuide mi corazón volverá a ser completo?”
La mujer sonrió de nuevo
“No querido, no lo entiendes…Yo no te entrego los frutos…solo su semilla”
“¿Y como se supone que haré germinar esa semilla?”
“Eso es algo que ahora solo tú puedes lograr...”
Axel quiso decir algo pero entonces la mujer ya se había desvanecido.
En el piso superior se oían ruidos. Axel salió corriendo hacia las puertas que le había nombrado la mujer. Había un amplio pasillo lleno de puertas a los lados. Axel iba leyendo las palabras grabadas sobre cada puerta: Hollow Bastion, Twidig Town, Traverse Town…
Finalmente se paró ante dos puertas en cuyas letras ponía: Desnitny Islands y Twidig Islands. Axel optó por la segunda opción. Al empujar la puerta esta produjo un pequeño chirrido y final mente Axel entró en ese mundo.
Dios, no, no puede ser, este lugar… se parece un montón a mi mundo…Axel está justo bajo el árbol sobre el cual nosotros construimos posteriormente una casita de madera. O.o
No…Aun no me lo creo…
Axel se cuelga en el cuello el medallón con forma de corazón.
El bebe se queda observando el pelo de Axel durante unos instantes, luego le agarra de un mechón y se pone a juguetear con su pelo sonriendo de oreja a oreja.
“Ase, Ase”
Axel sonríe y abraza a la niña con ternura, luego le hizo unas rosquillitas en la barriga. Dios, como me gustaría se ella en ese momento.Axel final mente la deja de nuevo en el suelo.
“Lo siento Hika pero hoy no podemos jugar”
¿Hika?… Axel suele llamarme Hika…No, no puede ser
¿Mi historia? ¿¡Estos sueños son mi historia!? Todo tiene relación…Esa niña, su cara, su pelo, sus ojos…Son los míos. Pero… ¿¡Quién demonios me manda estas visiones!?...No me lo creo.
Axel se aleja. La niña le mira con ojos de pena y extiende sus manos en un amago de alcanzarle.
“¿Ase?”
“Lo siento Hika, pero te juro que dentro de unos años encontraré este mundo y vendré a por ti”
Axel de despide con la mano y se aleja tras la puerta, la cual se desvanece en cuanto la cierra.

riete pero e estado a punto de echar una lagrimita al final xD

pobre